La preocupación por el medioambiente es parte del ADN de Vitapro donde siempre ha apostado por la sustentabilidad en el desarrollo de alimento balanceado, con sus marcas Nicovita y Salmofood.
Fuente de información: Vitapro / Comunicado de prensa
Este compromiso se ratifica con el objetivo para el 2020 de “superar el 75% de uso de ingredientes marinos provenientes de pesquerías sostenibles o en procesos de mejora como materia prima para nuestras dietas” señaló Hugo Carrillo, Gerente General de Vitapro.
Es así como el año 2016 la empresa emprendió en Ecuador un esfuerzo conjunto con varios grupos de interés, para lograr la creación del FIP (Fishery Improvement Project) para pequeños pelágicos que se inició en octubre de 2018, con lo cual la pesquería ecuatoriana se encamina hacia la sostenibilidad para la producción de harina y aceite de pescado.
En tanto en Chile, Salmofood instaló en el año 2012 la primera caldera de biomasa de Chiloé. Desde ahí́ hasta la fecha, han realizado el cálculo de su Huella de Carbono; un indicador internacional para medir la generación de gases de efecto invernadero y su impacto en el cambio Climático Mundial. A menor resultado, menor daño en el ambiente.
Este esfuerzo ha rendido sus frutos ya que en Chile se emiten 42 kilos de CO2 por tonelada de producto y en Perú, gracias a la apertura una caldera de biomasa en su planta hoy emite 49 kilos de CO2 por tonelada de producto. Como referencia, la competencia en Chile emite 75 kilos de CO2 por tonelada de producto y en Perú 54 kilos de CO2 por tonelada de producto.
La biomasa que se utiliza es un combustible neutro, compuesto por virutas, chips y astillas, proveniente de los residuos de la industria forestal, por lo tanto, el dióxido de carbono que se libera forma parte de la atmosfera actual.
Otro ejemplo de la preocupación de Vitapro por el entorno son las Dietas PRO de Salmofood lanzadas a principios del 2018. Se trata de una nueva solución nutricional que no depende de la inclusión de ingredientes de origen marino y que se caracteriza por tener una mayor digestibilidad y ser rentable para los productores de salmónidos.
Detrás del concepto PRO está lo que se entiende como “sustentabilidad eficiente”. Esto se viene trabajando al interior de la compañía desde 2014, cuando se pensó que era necesario y posible legar a dietas para peces donde se reemplace el 100% de la harina de pescado por otras materias primas que aporten los nutrientes necesarios manteniendo el mismo performance productivo de las dietas tradicionales, pero mejorando el costo del alimento y aportando a la sustentabilidad.
Al respecto, Hugo Carrillo recalcó que “creemos que esta es la forma de avanzar en acuicultura. Los productores de a poco se irán adaptando a ello. Y tal como hace unos 20 años la inclusión de la harina de pescado en las dietas era de alrededor de 36% y ahora puede llegar a un 5%, habrá mayor apertura hacia estos cambios que son necesarios. Esta es la forma de avanzar hacia un negocio sustentable y equilibrado en el tiempo”.