Por: Departamentos de Producción y Recursos Humanos, Fibras Industriales S.A. – FISA
Los últimos 18 meses han sido probablemente los momentos más dinámicos para la mayoría de las industrias en el mundo entero. Normalmente, cuando ocurre algún tipo de “desastre” económico, afecta a determinadas industrias a la vez. Pueden ser los sectores de bienes raíces junto con las industrias financieras o la minería junto con las industrias de producción, etc.
Pero solo una vez en un siglo sucede que casi toda la economía mundial entra en un giro con efectos dominó que no parecen terminar.
Todo comenzó con una pandemia que cerró industrias y líneas de producción durante algunas semanas debido a las cuarentenas que la mayoría de nosotros tuvimos que padecer. Después de la apertura de muchas industrias, empezó un período de aceleración que llegó junto con altas tasas de infección y mortalidad, lo que obligó a las empresas a replantear sus métodos de producción y a rediseñar los procedimientos de seguridad y trabajo, intentando a la vez mantener los niveles de eficiencia de producción.
Después del período inicial de altos contagios, hubo momentos de relativa tranquilidad en el combate a la pandemia Covid. Sin embargo, luego comenzaron a sentirse los efectos mariposa de cada bloqueo regional.

Empezó una gran fluctuación en los precios de la materia prima, largos tiempos de entrega como resultado de las paradas de producción y el periodo de aceleración, y luego los problemas con el suministro logístico internacional, que han causado aumentos de precios inimaginables en la industria del transporte marítimo principalmente.
“Hoy en día las empresas están agradecidas si pueden obtener tiempos de entrega razonables, incluso a precios más altos.“
Es bajo estas fluctuaciones y restricciones políticas y económicas en todo el mundo, que FISA ha sido lo más creativa y dinámica posible, con el objetivo de superar la mayor cantidad de obstáculos y mantener su estatus como proveedor líder de redes y jaulas que se enfoca en entregar pedidos a tiempo y en nunca dejar a un cliente desatendido.
“Para lidiar con las dificultades mencionadas anteriormente, FISA implementó cambios importantes en sus métodos de trabajo y es aquí donde nos gustaría compartir algunas de estas adaptaciones.”
Primero y, ante todo, tuvimos que reducir al mínimo la transmisión potencial de Covid al personal de la empresa. Esto implicó reducir la capacidad máxima de personal por m2, lo cual provocó una reducción de la mano de obra en determinadas máquinas y una pérdida en la eficiencia.
Como resultado, tuvimos que aumentar las horas de trabajo del personal incluyendo los domingos y algunos turnos nocturnos innecesarios. Es durante estos últimos meses donde hemos invertido en digitalizar más a la empresa, con lo cual se ha logrado neutralizar algunos de estos efectos, viendo ahora un futuro más brillante en el horizonte.

Al mismo tiempo que reducimos el número de trabajadores, mejoramos nuestra capacidad de trazabilidad, separando al personal en grupos claramente identificados a través de muñequeras de colores que ayudaron a identificar a las personas que estuvieron en contacto con algún trabajador que dio positivo al Covid. Esto permitió implementar los procedimientos de aislamiento adecuados y evitar mayores contagios.
Como parte de los requisitos para mantener a los equipos aislados, tuvimos que dividir el receso de almuerzo, el cual típicamente era de un grupo de 45 minutos, a cuatro o cinco recesos de 45 minutos para los diferentes equipos. Este mismo procedimiento se aplicó en el horario de vestuarios y en el horario de entrada y salida de los turnos.
“Adicionalmente, para algunos casos excepcionales, tuvimos que organizar un transporte especializado para el personal de alto riesgo y así evitar que estos trabajadores usen el concurrido transporte público. En el caso de los trabajadores de muy alto riesgo, se les solicitó que se quedaran en casa mientras recibían el pago completo.”
Para poder coordinar y tener éxito con los objetivos mencionados anteriormente, se creó un departamento completamente nuevo al que llamamos “Departamento de Recursos Humanos de Covid” el cual está todavía activo en 3 turnos, los 7 días de la semana. Este departamento atiende a nuestra planta de producción ubicada en Lima y a nuestra planta de armado ubicada a 90 km al norte de Lima.
Después del período inicial de choque y el de estabilización, FISA comenzó a ampliar su producción y a garantizar las entregas. Un primer paso que dimos fue asegurar la llegada de materia prima y la calidad de la misma. Entre abril y mayo del 2020 no estaba claro qué países e industrias estarían operando y por cuánto tiempo.

Fue bajo esta incertidumbre que FISA decidió aumentar sus existencias estratégicas de materia prima en un 50% y no arriesgar a tener volúmenes inadecuados en la línea de producción. Esto supuso realizar pedidos inmediatos a los proveedores estratégicos a pesar de no tener ventas confirmadas.
Además de incrementar los volúmenes de materia prima , se vio necesario mantener mayores inventarios de mercadería en proceso , y en algunos casos de producto terminado, esto con el fin de contrarrestar potenciales cierres laborales en el Perú.
“Afortunadamente, las estrategias mencionadas anteriormente resultaron fructíferas y durante la segunda mitad de 2020 FISA logró abastecer completamente a su base de clientes de pedidos existentes y nuevos.“
El recurrente aumento de los costos logísticos y la incertidumbre en las capacidades de envío por parte de los proveedores de fibras ha obligado a FISA a aumentar aún más los volúmenes estratégicos de materias primas, a pesar de los mayores costos financieros y el aumento de la asignación de capital que esto implica. Sumado a esto último la situación se ve aún más afectada por el rápido aumento de los precios de la gasolina, el cual ha llevado también a un aún mayor incremento en los precios de las materias primas.
Creemos que con el tiempo todas las empresas deben adaptarse a la nueva normalidad y aprender a producir de manera más eficiente. Además, parecería que el mundo está atravesando un período de aceleración que, con suerte, conducirá a un período de estabilización con un equilibrio entre la oferta y la demanda en toda la cadena de producción.
Esperamos que la consistencia de nuestro suministro continúe demostrando su valía y que nuestra mayor eficiencia conduzca a futuros recortes de precios, una vez que se estabilice los precios de las materias primas y las condiciones de transporte.
Mas información: FISA