La aplicación de insumos calcáreos en agua de cultivo de camarón es una práctica ampliamente utilizada; no obstante, existe muy poca información sobre sus verdaderas ventajas, por lo que resulta sumamente útil profundizar acerca de sus efectos en la producción de camarones.
La aplicación de insumos calcáreos en piscinas camaroneras es una práctica muy común; sin embargo, existe relativamente poca información sobre los beneficios reales que se consiguen con este tipo de procedimiento.
“En términos generales, estos insumos se utilizan con el fin de desinfectar el fondo, regular el pH e incrementar la alcalinidad en piscinas acuícolas (Boyd, 2017). “
Al existir escasa información sobre sus beneficios, la aplicación de insumos calcáreos en las piscinas camaroneras se torna en algunas ocasiones innecesaria y contraproducente, lo que conlleva una afectación económica o, peor aún, perturbaciones o desequilibrios en el medio.
Por ejemplo, un desequilibrio entre concentraciones de potasio (K) y sodio (Na) en hemolinfa, puede ocasionar mortalidad en camarones (Prangnell y Fotedar, 2005; Zhu et al., 2004; Sowers et al., 2005), así como la falta de una adecuada concentración de K en el perfil del agua, genera un impacto negativo en la supervivencia (McGraw, 2003).
“Asimismo, la relación entre el magnesio (Mg) y K es importante al ser cationes esenciales para el crecimiento, supervivencia y osmorregulación de los crustáceos (Mantel y Farmer, 1983; Pequeux, 1995).”
En este sentido, el propósito de este artículo es presentar los resultados de un estudio realizado en agua de cultivo de camarón, aplicando diferentes insumos calcáreos: carbonato de calcio, hidróxido de calcio y sulfato de calcio, en diferentes dosificaciones y evaluando sus efectos.
Materiales y métodos
El estudio se llevó a cabo con tres productos para encalar: carbonato de calcio (CaCO3), hidróxido de calcio (Ca(OH)2) y sulfato de calcio pulverizado (CaSO4-2H2O) (Figura 1).
La valoración se desarrolló en una granja ubicada en el sector Sabana Grande, provincia del Guayas, Ecuador. Se tomaron muestras de agua con una salinidad de 27 ppt de una piscina camaronera para su análisis antes de la aplicación de los insumos calcáreos (CaCO3, Ca(OH)2 y CaSO4-2H2O) (Figura 2).
Se emplearon carbonato de calcio y sulfato de calcio en sacos de 45 kg; mientras que cada saco de hidróxido de calcio contenía 25 kg. Las lecturas de pH, calcio (Ca), Mg, K y alcalinidad se realizaron en un ensayo efectuado en época de verano y usando un equipo YSI 2500 (Tablas 1 y 2).
Resultados
Según Van Wyk y Scarpa (1999), los camarones marinos crecen mejor con niveles de pH de 7.0 a 9.0. El pH del agua aumentó a medida que se dosificaban los productos calcáreos (Figura 3), siendo el hidróxido de calcio el que más efecto tuvo en comparación con los otros tratamientos. Esta elevación del pH fue más evidente a partir de la aplicación de 5 y 10 sacos por hectárea.
La disociación del hidróxido de calcio explicaría el incremento del pH cuando se aplica este insumo, debido a que en presencia de agua el hidróxido de calcio se disocia en iones hidroxilo (OH-) que tienen una fuerte propiedad alcalina:
La alcalinidad se incrementó con el uso del carbonato y el hidróxido de calcio, mientras que se observó un efecto contrario con el sulfato de calcio a partir de la adición de 5 sacos/ha, disminuyendo la alcalinidad hasta llegar a 65 mg/l cuando se agregaron 10 sacos/ha, lo que significó una reducción de 38% respecto al valor inicial (Figura 3).
En cuanto al calcio, se esperaba un incremento a medida que se aumentara la dosificación de los insumos calcáreos, lo cual se comprobó con los resultados obtenidos:
Con 2 sacos/ha, la concentración promedio pasó de 275 a 300 mg/l, aumento de apenas el 8%; mientras que con 5 sacos/ha se incrementó en 14% al pasar a 350 mg/l. Finalmente, con 10 sacos/ha la concentración promedio pasó a 430 mg/l, un incremento del 33% (Figura 4a).
“El magnesio, al igual que el calcio, incrementa su valor al aumentar el insumo calcáreo; aun así, en el caso del carbonato de calcio se produce una leve reducción cuando se dosifican 10 sacos/ha.”
Con el hidróxido de calcio se consigue el mayor nivel de magnesio (1,560 mg/l) respecto a los otros dos tratamientos (1,280 mg/l con carbonato de calcio y 1,440 mg/l con sulfato de calcio) debido a que este producto tiene en su composición alrededor de 1% de óxido de magnesio (Figura 4b).
Los resultados sugieren una disminución en el nivel de potasio al usar carbonato de calcio, mientras que no hay una afectación en el nivel de este mineral cuando se usa hidróxido o sulfato de calcio (Figura 4c).
Sin embargo, cuando se analizan las relaciones Ca:K y Mg:Ca los datos muestran un desbalance respecto al agua de mar que tiene tasas Ca:K=1.1 y Mg:Ca=3.4 (Tabla 3) (Goldberg, 1963).
De acuerdo con los valores obtenidos se puede pensar que la más alta concentración ensayada (10 sacos/ha) el alto aporte de calcio tiene un efecto en los niveles de potasio.
Respecto a esto, Albareda y Sánchez (1958) reportaron que concentraciones elevadas de calcio afectan la asimilación de potasio; de igual manera, Faedo (1980) concluyó que tratamientos con moderadas cantidades de carbonato de calcio implicaban una reducción del contenido de potasio intercambiable.
Tomando en cuenta la importancia del potasio en la supervivencia del camarón, por su papel como principal catión intracelular, necesario para el correcto funcionamiento de la regulación de iones en el equilibrio ácido/base, es esencial considerar que una relación deficiente de este mineral podría conducir a una pobre regulación del volumen intracelular.
“La actividad enzimática puede también estar relacionada directamente con la concentración de potasio, lo que afectaría la capacidad de osmorregulación (Bursey y Lane, 1971).”
Por tanto, la adición de minerales en el alimento puede ser una alternativa viable para corregir estos desbalances y mejorar considerablemente la supervivencia del camarón, al subsanar las deficiencias especialmente de K a través de la suplementación de estos minerales en la dieta (Molina et al., 2019).
Conclusión
Los resultados sugieren que el uso de insumos calcáreos puede ayudar a tener un mejor balance de minerales; sin embargo, ninguno de los insumos utilizados satisface o ayuda a suplir todas las deficiencias de los iones.
“Debido a que el hidróxido de calcio eleva rápidamente el pH no es recomendable, pues su uso podría resultar contraproducente.”
Las correcciones cuando se utilizan insumos calcáreos, en la mayoría de los casos no debería ir más allá de los 5 sacos por hectárea, cuando se parte de una condición del agua como la encontrada en: Ca: Mg: K = 1.0: 3.6: 1.2.
En caso de compensar deficiencias o desbalances de iones en el agua, estos deben ser equilibrados a nivel fisiológico, siendo el alimento balanceado modificado dietéticamente una alternativa válida y costo eficiente para corregir estas carencias.
Este artículo es patrocinado por Skretting
“APLICACIÓN DE INSUMOS CALCÁREOS” escrito por José Cisneros, Carla Torres, Manuel Espinoza Ortega, Carlos Mora Pinargote y César Molina Poveda.
La versión original fue publicada en el BOLETÍN # 27 a través www.skretting.ec.
Se puede acceder a la versión completa a través de Boletin 27 Insumos calcareos (skretting.com)
Una idea sobre “Aplicación de insumos calcáreos y sus efectos en piscinas acuícolas, un estudio en la provincia del Guayas, Ecuador”
Excelente información.
Bien claro y sencillo de interpretar.
Muchas Gracias por su aporte.