La industria acuícola de cultivo de bivalvos y moluscos a lo largo de la costa oeste de los EE.UU. es particularmente vulnerable a la acidificación del océano, por lo que profundizar acerca de la percepción de dueños y gerentes de granjas puede contribuir a identificar estrategias específicas para mejorar las políticas, la coordinación y los avances científicos dentro de la industria y las agencias asociadas.
Las comunidades costeras y los usuarios de sus recursos experimentan una amplia variedad de factores estresantes ambientales y de sustento, incluida la intensa competencia por recursos, la urbanización y la degradación ambiental que afectan los recursos de los cuales dependen.
“El cambio climático exacerba estos factores de estrés y crea nuevas presiones sobre el entorno costero y las personas cuyos medios de subsistencia dependen de ellos.”
La gran mayoría del trabajo académico sobre el impacto del cambio climático ha consistido en la evaluación biofísica y respuestas a los estresores del ambiente. Si bien los académicos han comenzado a explorar los aspectos sociales, económicos y políticos de la adaptación a estos cambios, gran parte de este trabajo sigue siendo teórico.
Uno de los sistemas para los que la adaptación climática se presenta crítica en los próximos años es la acuicultura marina, en especial, la acuicultura de mariscos (definida en este estudio como cultivo de bivalvos y moluscos).
Se sabe relativamente poco acerca de cómo los operadores acuícolas y las comunidades dependientes de las operaciones acuícolas perciben y responden a la acidificación oceánica (OA) y a otros factores ambientales estresantes, o sobre las acciones específicas que han tomado o las necesidades que tienen para prepararse o mitigar estos factores.
En tal sentido, la acuicultura de moluscos surge como una oportunidad para realizar investigaciones integradoras sobre sistemas socioecológicos, las cuales contribuyan a mejorar la comprensión de la capacidad de adaptación frente a los impactos climáticos actuales y futuros.
En el estado de California, se está prestando atención a la acuicultura, con inversión en investigación relacionada con el desarrollo de un plan estatal de acuicultura. Sin embargo, esta región está excepcionalmente expuesta al estrés inducido por el cambio climático a través de OA y otros factores ambientales estresantes, los cuales pueden ser de particular preocupación para la actividad.
De manera particular, este estudio se enfoca en la acuicultura de bivalvos y moluscos en tres regiones del estado de California: Humboldt, Point Reyes y la Costa Central.
Método
Se realizaron entrevistas semiestructuradas a los dueños y/o gerentes principales de las operaciones acuícolas en las tres regiones focales (Figura 1), de tres a cuatro entrevistas por región. Estas se diseñaron para abordar las preguntas de investigación, utilizando guías de trabajos anteriores en la región como marco de referencia.
La guía fue evaluada previamente por expertos en acuicultura de mariscos para garantizar preguntas claras y relevantes acerca de la percepción de los entrevistados sobre el cambio ambiental.
Hallazgos
El escenario acuícola regional de California
Se solicitaron entrevistas a representantes de 13 operaciones de bivalvos y moluscos en las regiones combinadas, de las 19 operaciones existentes en el estado. Se recibieron 11 respuestas, resultando en un tamaño de muestra que representa más de la mitad del total (Tabla 1). Las ostras fueron las especies más comunes cultivadas por los entrevistados, en 8 de las 11 granjas.
Percepción del cambio ambiental e impacto
En todas las entrevistas, las enfermedades marinas y los patógenos se mencionaron frecuentemente como impactos ambientales (Figura 2), al igual que las lluvias y la proliferación de algas, debido a la asociación que tienen estos factores con enfermedades y patógenos marinos.
La temperatura del agua se señaló con frecuencia y, en algunos casos, los productores informaron que la misma se estaba volviendo más cálida.
Muchos productores también refirieron los factores químicos del carbonato; sin embargo, al contrario de los demás factores ambientales mostrados en la Figura 2, se preguntó específicamente si ellos pensaban que habían experimentado cambios o impactos derivados de la OA, lo que dificulta evaluar la percepción de los entrevistados sobre la importancia relativa de la OA en comparación con otros factores mencionados.
Estrategias de capacidad adaptativa
Dada la gran cantidad de factores estresantes e impactos que experimentan los productores, los entrevistados identificaron una variedad de posibles estrategias de adaptación para garantizar que sus operaciones sobrevivan al cambio, tanto de OA como de desafíos ambientales, sociales, económicos o regulatorios más amplios.
Las estrategias específicas discutidas por los productores pueden describirse en tres categorías generales:
1. Políticas y trabajo en red.
Las estrategias discutidas con mayor frecuencia corresponden a la categoría de política y redes de apoyo o trabajo, siendo las estrategias adaptativas más discutidas los cambios regulatorios y de permisología y el desarrollo y apoyo en redes (Figura 3).
Cuando se profundizó en permisología y regulaciones, los comentarios estuvieron dirigidos a que los procesos de permisos difíciles, costosos y lentos inhibían la capacidad general de adaptarse o permanecer resistente al cambio, un desafío descrito anteriormente con respecto a la acuicultura tanto en California como en los Estados Unidos (EE.UU.).
2. Gestión de las granjas.
Los productores mencionaron una serie de estrategias prácticas en torno a la gestión de las granjas de bivalvos y moluscos, que pueden facilitar su capacidad adaptativa: permitir una mayor flexibilidad en la especie o etapa cultivada, o en los métodos o localización del cultivo.
“Cultivar especies o etapas de vida numerosas o adicionales proporciona un tipo de seguro, similar al ‘efecto portafolio’ aplicado tanto en el área ecológica como económica.”
De esta manera, los negocios de los productores podrían mantener los ingresos y las operaciones si una de las especies o etapa de vida falla más que la otra, debido a eventos de mortalidad, cambios en el mercado u otros factores.
Algunos productores identificaron esto como una estrategia que será más necesaria en el futuro, para diversificar sus productos y asegurar un ingreso estable bajo condiciones oceánicas variables. Los productores también expresaron su deseo de modificar o expandir los métodos de cultivo, el equipo o la ubicación para generar una mayor flexibilidad en las operaciones.
3. Ciencia.
La necesidad de un mejor entendimiento de los impulsores de la salud y la mortalidad de los bivalvos y moluscos se mencionó en todas las entrevistas menos en una (Figura 3). Los eventos de mortalidad pueden ser severos y periódicamente conducen a la pérdida de la mayoría de los bivalvos y moluscos en algunas áreas de arrendamiento o criaderos.
Discusión
Facilitar estrategias de adaptación
Las entrevistas con los productores revelaron numerosos factores estresantes ambientales y de otro tipo que afectan a la industria de bivalvos y moluscos en California e identificaron múltiples estrategias disponibles para facilitar la capacidad de la industria para adaptarse a estos factores estresantes.
Las estrategias adaptativas estaban frecuentemente vinculadas, en cuanto a la reducción de un factor estresante que pudiera permitir a los productores asignar recursos para la implementación de una estrategia dirigida a otros factores estresantes.
En particular, la capacidad de los productores para ejecutar una determinada estrategia de adaptación a menudo podría verse facilitada por un proceso de permisos modificado.
De hecho, el enfoque citado con más frecuencia para la adaptación fue la modificación o agilización de los procesos regulatorios y de permisos, ya que la obtención de permisos y el cumplimiento de las reglamentaciones son necesarios para realizar cambios en la mayoría de las prácticas de gestión acuícola.
Implicaciones para la capacidad de adaptación
Aunque el estudio fue específico para la industria acuícola de bivalvos y moluscos de la costa oeste de EE.UU., su relevancia y vínculos con el campo más amplio de la capacidad de adaptación es evidente. Las estrategias descritas, aunque adaptadas a estas especies en específico y región, se pueden clasificar de manera más amplia en dominios de capacidad de adaptación observados en otras comunidades y geografías.
En un informe sobre el tema, Cinner et al. (2018) identificaron cinco dominios comunes de capacidad de adaptación: activos, flexibilidad, organización social, aprendizaje y agencia.
“Al realizar un análisis cruzado de estos cinco dominios y las estrategias identificadas por los productores, se concluye que se pueden poner en práctica en las 18 estrategias presentadas.”
Por ejemplo, dentro del dominio de la “flexibilidad”, muchas de las estrategias de manejo de granjas descritas se basan en la necesidad de flexibilidad, como el deseo de adaptar las especies o los equipos usados para el cultivo (especies y método/tipo de equipo) o la capacidad de mover equipos alrededor de su área de arrendamiento (flexibilidad espacial) (Figura 3).
De manera similar, los productores identificaron numerosos “activos” necesarios para implementar estas estrategias, por ejemplo, acceso al equipo necesario (métodos/ equipo) o tipos de instalaciones, como un criadero y un espacio de engorde (múltiples etapas del ciclo de vida).
El dominio de la “organización social” es evidente en la confianza y el deseo de los productores de mejorar sus redes para obtener información y compartir datos. Las estrategias del dominio de “aprendizaje” son claras en las lagunas científicas identificadas, como el deseo de obtener más información sobre los impulsores de la mortalidad de los bivalvos y moluscos o sobre las condiciones de OA.
Conclusiones
Los productores de bivalvos y moluscos de California observan y experimentan de manera directa numerosos cambios ambientales, algunos de los cuales son más fáciles de observar o medir. Si bien la mayoría de los productores expresaron su preocupación por las condiciones oceánicas cambiantes, con frecuencia fue un reto para ellos establecer un vínculo directo entre los resultados de sus operaciones y los cambios que podían ser fácilmente observados o medidos.
“En particular, relacionar impactos o resultados a OA planteó desafíos en sus habilidades para implementar respuestas directas.”
En cambio, OA se percibía como un multiplicador de estrés potencial y desconocido, y los productores identificaron (y en muchos casos están implementando) una serie de estrategias que podrían ayudarlos a adaptarse a los cambios resultantes de factores estresantes ambientales, económicos o políticos.
Algunas estrategias apuntaron directamente al OA (p. ej., mejorar el monitoreo del pH o desarrollar reproductores resistentes al OA), pero la amplia gama de estrategias apoyó la adaptación a múltiples factores estresantes para facilitar una mayor resiliencia en el cultivo.
“Facilitar la capacidad de adaptación requiere un enfoque coordinado que reconozca la naturaleza interconectada de los factores de estrés y las estrategias asociadas, por lo que la reducción de un tipo de factor de estrés puede permitir a los productores asignar recursos de manera proactiva para la implementación de estrategias de adaptación relacionadas con otros factores de estrés para mejorar la resiliencia general.”
Al evaluar las estrategias de adaptación identificadas por los operadores de acuicultura y los desafíos clave para su ejecución, este trabajo evidenció la necesidad de mejorar las políticas, la coordinación y los avances científicos dentro de la industria de la acuicultura de bivalvos y moluscos y las agencias asociadas.
Esta es una versión resumida desarrollada por el equipo editorial de Panorama Acuícola Magazine del artículo “CALIFORNIA SHELLFISH FARMERS: PERCEPTIONS OF CHANGING OCEAN CONDITIONS AND STRATEGIES FOR ADAPTIVE CAPACITY” escrito por MELISSA WARD -San Diego State University; ANA K. SPALDING, Oregon State University; ARIELLE LEVINE – San Diego State University; ERIKA ALLEN WOLTERS- Oregon State University.
La versión original, incluyendo tablas y figuras, fue publicada en MARZO de 2022 en OCEAN AND COASTAL MANAGEMENT.
Se puede acceder a la versión completa a través de https://doi.org/10.1016/j.ocecoaman.2022.106155