La compañía española Ovapisicis anunció recientemente la adquisición de una nueva granja en el Concello de Baralla, en la provincia gallega de Lugo, con la que se propone satisfacer su gran demanda de huevas de trucha arcoíris de la mejor calidad y ofrecer más servicios a nuestros clientes aún. La nueva instalación, difundieron orgullosos, estará a pleno rendimiento a finales de 2026.
Según informaron desde la empresa con más de 30 años de experiencia, la estratégica localización de su nueva granja ofrece una excelente calidad de agua, “factor indispensable para nuestra producción”.
La nueva granja, antes conocida como Granja Emilio Folgueiras, se llamará Ovapiscis Baralla y ahora se suma a sus otras seis instalaciones en territorio español para ofrecer unas huevas de trucha que cumplen con los más altos estándares “gracias al trabajo de un equipo totalmente especializado y la utilización de la tecnología más avanzada”, dijeron.
Primer productor europeo en su tipo
Fundada en 1995, Ovapiscis fue creada por un grupo de productores de trucha arcoíris y actualmente es uno de los mayores productores de hueva de trucha arcoíris del mundo. La empresa gallega está reconocida por Global GAP como Primer Productor Europeo de Hueva de Trucha y ahora continúa con su estrategia de crecimiento y expansión en el territorio español.
La empresa opera un total de seis granjas dedicadas a la producción de huevas de trucha arcoíris, además de una instalación exclusiva para el desarrollo genético. Estas granjas están estratégicamente ubicadas en el norte de España, abarcando Galicia, Castilla-León y Aragón, comunidades elegidas por su excepcional calidad de agua y configuración geográfica ideal.
En el presente, Ovapiscis produce aproximadamente 540 millones de huevas de trucha arcoíris al año. Con la incorporación de la nueva instalación en Baralla, equipada con sistemas de producción acuícola de última generación para garantizar el bienestar óptimo de los reproductores, la empresa anticipa un aumento sustancial en la producción para fines de 2026. Esta expansión contribuirá sin duda a mantener los altos estándares de calidad por los que Ovapiscis es conocida en la industria de las huevas.
Preciso proceso de producción
“Nuestros más de 30 años de experiencia en el cultivo de huevas de trucha nos han permitido crear un preciso proceso de producción que empieza por la selección y crecimiento de futuros reproductores, y sigue con el acondicionamiento de reproductores y desove, la fecundación, la incubación y la selección, conteo y envío”.
En Ovapiscis aseguran que, además de producir huevas de trucha con una calidad óptima, pueden garantizar que el producto se mantenga en las mejores condiciones durante todo el proceso de producción. De hecho, para optimizar las condiciones de envío de su producto a cualquier punto del planeta, incluyen en cada pedido un informe de recepción que el cliente tiene que devolver cumplimentado. “Así, escuchando a nuestros clientes, logramos mejorar cada día y garantizar la óptima calidad de nuestras huevas durante su transporte”, dicen.
“Desde la fundación de Ovapiscis invertimos una parte importante de nuestro presupuesto en selección genética realizada con métodos respetuosos con los animales y el medio ambiente. Este aspecto es tan importante para nosotros que una de nuestras instalaciones se dedica exclusivamente a este fin”, agregan.
Por otra parte, y para ofrecer huevas embrionadas de la más alta calidad y el mejor servicio, en la empresa realizan periódicamente investigaciones aplicadas. Además, participan activamente en diferentes proyectos a nivel europeo y nacional.
